Dios colocará sonrisas en nuestros rostros

"Pondrá de nuevo risas en tu boca, y gritos de alegría en tus labios".
Job 8:21

Job enfrentó tormentos profundos. No solo sufrió en su cuerpo, sino que también cargó con heridas en su corazón y en su espíritu. Lloró por lo que perdió y por la confusión de no comprender el motivo de tanto dolor. Para colmo, fue señalado por todos (incluso por sus cercanos) como si fuera un culpable merecedor de tales aflicciones. Sin embargo, solo Dios, únicamente Él, sabía la verdad sobre la esencia de aquel hombre y su fidelidad.

Entre el torbellino de palabras que Job escuchaba, uno de sus compañeros expresó una certeza valiosa: Dios no desprecia al justo. Él volverá a traer risas y felicidad a tu vida. En efecto, solo Dios nos entiende plenamente y tiene el poder de otorgarnos un gozo completo. El Salmo 126 nos alienta con esta misma promesa:

"Nuestros labios se llenaron de alegría; nuestras voces, de cantos de júbilo. Incluso las demás naciones decían: «El Señor ha obrado maravillas por ellos»".
Salmo 126:2

¡Confía en ello!

Aunque atravesemos tormentas de sufrimiento, Dios puede darnos una alegría auténtica y profunda.
El Señor conoce tu interior y tu carácter. Él es el Juez perfecto, defenderá tu caso incluso si te culpan sin razón.
Jesucristo te da fuerza y te sostiene para superar las pruebas de la vida.
Confía más allá de las situaciones. ¡Dios te colmará de un gozo eterno!

Oremos Juntos:

Señor nuestro Dios, ¡inunda mi ser con tu gozo en este día! Que las dificultades que enfrentamos no apaguen la felicidad ni la esperanza de una vida radiante junto a ti. Guíame para depositar mi fe en ti, aunque no comprenda el propósito de tantos retos. ¡Que tu gozo me dé fuerzas! Y que Cristo sea siempre mi propósito y la fuente de mi alegría. En el nombre de Jesús, amén.

por: Ministerio Vida