Cómo orar por Israel en tiempos de guerra: Una guía bíblica

¿Por qué orar por Israel?

La Biblia establece que Israel ocupa un lugar único en el plan redentor de Dios. Desde el pacto con Abraham en Génesis 12:3, Dios declara: “Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra”. Israel es el pueblo escogido por Dios para ser luz a las naciones Isaías 42:6 y a través de él vino el Mesías, Jesucristo, quien trajo salvación al mundo.

Orar por Israel no es solo un mandato espiritual, sino un acto de obediencia y amor. Romanos 11:17-24 nos recuerda que los gentiles hemos sido injertados en el olivo de Israel, participando de las promesas de Dios.

Además, en el Salmo 122:6 nos exhorta directamente diciendo: “Pedid por la paz de Jerusalén; sean prosperados los que te aman”. Orar por Israel es alinearnos con el corazón de Dios, quien no ha desechado a Su pueblo Romanos 11:1-2.

En tiempos de guerra, la oración por Israel cobra mayor urgencia. Los conflictos actuales no solo afectan la seguridad física del pueblo hebreo, sino que también tienen implicaciones proféticas.

Zacarías 12:2-3 describe a Jerusalén como una “copa que hará temblar a todos los pueblos” en los últimos días. Como creyentes, debemos interceder para que el propósito de Dios se cumpla en Israel, tanto en su protección como en su restauración espiritual.

¿Cómo orar por Israel en tiempos de guerra?

La oración debe ser intencional, bíblica y guiada por el Espíritu Santo. A continuación, se presentan cinco formas específicas de orar por Israel, basadas en las Escrituras:

• Por la paz de Jerusalén y la protección del pueblo

  
       Salmo 122:6 es un punto de partida claro: “Pedid por la paz de Jerusalén”. Ora para que Dios guarde a Israel de sus enemigos, proteja a sus ciudadanos y traiga paz verdadera.

      Pide por sabiduría para los líderes de Israel a través de 1 Timoteo 2:1-2) y por fortaleza para los soldados y familias afectadas por el conflicto. Intercede también por los inocentes atrapados en la guerra, para que encuentren refugio en Dios Salmo 46:1.

• Por la restauración espiritual de Israel

  
          La salvación de Israel es central en el plan de Dios. Romanos 11:26 profetiza que “todo Israel será salvo”. Ora para que el pueblo hebreo reconozca a Jesucristo como su Mesías y Salvador.

           Pide que el velo sea quitado de sus corazones 2 Corintios 3:15-16 y que el Espíritu Santo traiga un avivamiento espiritual en la nación.

• Por la unidad del pueblo de Dios
          En tiempos de guerra, la división puede debilitar a una nación. Ora para que Israel experimente unidad entre sus habitantes, líderes y comunidades.

  Juan 17:21 registra la oración de Jesús por la unidad de los creyentes, un principio que podemos aplicar al orar por la cohesión del pueblo hebreo.

• Por la justicia y la verdad en el conflicto
           Los conflictos en Israel a menudo son distorsionados por narrativas sesgadas. Ora para que la verdad prevalezca Juan 8:32 y que Dios frene las mentiras y la propaganda que alimentan el odio contra Israel.

       Pide que Su justicia reine en medio de la guerra y que los corazones de los enemigos sean transformados Proverbios 21:1.

• Por el cumplimiento de las promesas de Dios
          Dios ha hecho promesas eternas a Israel, incluyendo la restauración de la tierra y el establecimiento de Su reino Jeremías 31:35-37.

         Ora para que estas promesas se cumplan según Su tiempo perfecto y para que Israel sea un testimonio vivo del poder y la fidelidad de Dios.

Principios para orar con un corazón correcto

• Ora con humildad: Reconoce que solo Dios conoce el panorama completo de Su plan para Israel Isaías 55:8-9. Evita posturas arrogantes o prejuiciosas al interceder.

• Ora con amor: Ama al pueblo hebreo como Dios lo ama, pero también ora por los enemigos de Israel, siguiendo el mandato de Jesús en Mateo 5:44.

• Ora con fe: Confía en que Dios escucha tus oraciones y que Su voluntad se cumplirá 1 Juan 5:14-15.

• Ora con perseverancia: Los conflictos en Israel son complejos y prolongados. No te desanimes, sino persevera en la oración (Lucas 18:1).

Como creyentes, orar por Israel no es opcional; es un privilegio y una responsabilidad. El pueblo hebreo, amado por Dios, enfrenta batallas físicas y espirituales que requieren nuestra intercesión.

Al clamar por Israel, nos unimos al corazón de Dios, quien prometió no abandonar a Su pueblo. Que nuestras oraciones, guiadas por la Palabra y el Espíritu, sean un instrumento para la paz, la salvación y el cumplimiento del propósito divino en Israel.

por: Lcdo. Juan Carlos Moros, periodista y creyente comprometido con compartir la verdad bíblica en tiempos de necesidad.